“Se cortó la electricidad en el Barrio Universitario. Se lanzaron bengalas y posteriormente vino un ataque directo a estudiantes que se encontraban en forma pacífica en las afueras del edificio de la Facultad”, denuncó el decano en base a los relatos de los guardias y de alumnos.

En tanto los estudiantes relataron que “a las 23:30 se cortó la electricidad en todo el campus y nos dirigimos pacíficamente a la escala de entrada a la Facultad, y algunos prendimos velas para iluminarnos. A las 12:20 horas pudimos ver el lanzamiento de bengalas en el Barrio Universitario, lo que iluminó todo el campus.Entonces entramos a la Facultad, por cuanto era posible ver el despliegue de Fuerzas Especiales (aproximadamente 30 policías). Cuando intentamos ingresar ya estaban sobre nosotros y, cuando logramos cerrar las puertas, procedieron a quebrar vidrios de la entrada y del frontis de la Facultad con piedras y palos, al tiempo que lanzaron —sin mediar provocación alguna—, tres bombas lacrimógenas al interior del edificio las que generaron gran conmoción y ahogo temporal entre los estudiantes. Algunos de ellos quedaron semi-inconscientes y con vómitos”.

“Consecuencia de la brutal agresión con piedras, bombas y palos resultó herido con herida cortante en la mano y contusión en la frente nuestro compañero Heraldo Rojas, al intentar impedir el ingreso de Fuerzas Especiales de Carabineros”, afirmaron los estudiantes.

Frente a esto el decano, Abelardo Castro, dijo que “lo ocurrido es especialmente grave, si quienes transgreden los derechos ciudadanos son agentes del estado cuya función es preservar el orden público”.

“Como autoridad máxima de la Facultad llamo a condenar rotundamente lo acontecido hace algunos instantes. Esta es una nueva violación del artículo N° 1 de la Declaración de los Derechos Humanos que expresa: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.” Asimismo al artículo Nº 3 que indica: “Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona”. Al artículo 20 inciso Nº 1 que manifiesta que: “Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacífica”.

El decano también declaró que “se vulneró el derecho consagrado en la Constitución Política de Chile que en su artículo Nº 13 otorga el derecho a reunirse pacíficamente, sin permiso previo y sin armas”.