Se trata de la octava economía más grande del mundo, más grande que Grecia, Irlanda y Portugal juntos.

A nivel político, Italia se mantiene en un estado de agitación tras el anuncio de dimisión del Primer Ministro Silvio Berlusconi, que se ha comprometido a renunciar luego de que el parlamento apruebe las medidas de austeridad radicales exigidas para aplacar los mercados.