Puerta del Sol de Madrid, Plaza Cataluña, en Barcelona, la Bastilla en París, Munich, Nueva York, Roma … Londres. Las imágenes de las muchas ciudades que han organizado la continuación del proceso que comenzó el año pasado están comenzando a llegar y este notable joven movimiento está mostrando su capacidad para movilizar a la gente mas allá de las fronteras. ¿Será capaz de lograr el nivel como fuente de inspiración presente en todos los cambios históricos importantes? No es una cuestión de esperanza, sino de participar activamente, porque ya estamos presenciando algunas alternativas muy terribles que surgen como consecuencia de la crisis.

Muchos podrían sentirse bien con las rebeliones de los accionistas de corporaciones (incluyendo el Bank of America y Barclays) votando en contra de algunos de los excesos de la violencia económica en la forma de bonificaciones desproporcionadas y despidos de lujo. Sin embargo, estos pequeños ajustes en el sistema no lo cambian, sino que son las válvulas de seguridad incorporadas que lo mantienen en marcha. A menos, claro, que la gente decida ampliar este recién descubierto sentido de poder en la acción conjunta y mire cuestiones más fundamentales.

Al mismo tiempo, la Investigación de Leveson continúa profundizando en las turbio maquinaciones (que hacen y deshacen carreras políticas) del imperio de medios de comunicación de Rupert Murdoch y un nuevo éxito de taquilla de Hollywood, «Los Vengadores», en 3D para un máximo efecto, continúa la larga tradición de adormecer la conciencia del público con otra historia (muy atrayente, sin duda) de agentes de la ley extraoficiales autorizados a romper las reglas porque están salvándonos a todos. Se refuerza, así, una vez más, el concepto de la venganza como respuesta a los conflictos, y la destrucción como entretenimiento, además de que los buenos siempre ganan, no importa qué está ocurriendo en zonas de guerra reales y en países bajo fuego. Los medios de comunicación, Hollywood incluido, son la única herramienta que influye no sobre el 1% o el 99%, sino sobre el 100%, es lo que da forma a nuestras creencias y acciones, con una capacidad de sugestión mucho más poderosa que la educación y la familia. Y cruza *todas* las fronteras.

A medida que el movimiento Ocupar/Indignados/Primaveras continúa en su búsqueda de imágenes nuevas para un mundo justo y sin violencia, debemos ser conscientes de este monopolio sobre la subjetividad del ser humano, no para censurar, sino para elevar nuestro nivel de conciencia colectiva y aprovechar al máximo el efecto compensador de los medios de comunicación alternativos.

Tales como Pressenza 😉